Tras cerca de tres años de ejercicio caótico y largas temporadas de inactividad laboral, es despedido de la gerencia del HUC, Julio Villalobos Hidalgo, llegado al centro sanitario de la mano del Partido Popular y su responsable sanitario en el Cabildo, Vicente Álvarez Gil. Con un sueldo anual bruto de 18 millones de pesetas, más alojamiento, dietas, coche oficial y traslados gratuitos a España, Villalobos recibió una indemnización de más de 10 millones de pesetas de dinero público y durante el tiempo que permaneció en el centro sanitario se ganó el odio de un amplio sector de los trabajadores al intentar poner en marcha una modalidad de privatización y mercantilización de algunos servicios. Además su gestión resultó especialmente lesiva para el funcionamiento del centro. Fue el gerente de la sanidad mejor pagado que se recuerda.