Coralia Lobato, es Técnica de Laboratorio y representante sindical del área sanitaria de Intersindical Canaria en Lanzarote, responsabilidad esta que compatibiliza con el liderazgo insular del sindicato en la isla. Además, en las últimas elecciones municipales fue elegida concejal de ayuntamiento de Arrecife por el partido Somos Lanzarote.  En la presente entrevista, desde su vertiente profesional y reivindicativa, la compañera nos plantea algunas reflexiones sobre las carencias sanitarias en la isla.

Tras complicadas negociaciones con los trabajadores, hace ahora unos dos años, el Hospital Insular de la Isla, se integró en el SCS, ¿qué balance podemos hacer hoy en los aspectos laborales y asistenciales? 

Es verdad que las negociaciones con respecto a la integración de los trabajadores del hospital insular de Lanzarote fue complicada, porque querían hacer todo deprisa ya que se acercaban las elecciones locales y autonómicas en el 2019, y no reparaban en todas las peculiaridades que tenían estos trabajadores, ya que son los únicos que están formados y preparados para trabajar en un hospital geriátrico. Como bien decía en aquel momento, Pedro San Ginés, presidente del Cabildo, era una cuestión de fe que el Gobierno de Canarias respetara todos los derechos que se firmaron como acuerdos, y así fue, una cuestión de fe, ya que desde que se integraron se ha tenido problemas para las contrataciones, sobre todo en aquellas categorías de los grupos D y E, que no estaban integrados en las listas del SCS ya que no se habían presentado a las oposiciones del 2007. Al personal laboral, se le ofertaban contratos en precario. En estos dos años no hemos dejado de luchar para que a estos trabajadores se les respetaran sus derechos recogidos en el acuerdo, pero casi sin éxito. Por otro lado, el compromiso del SCS era el de no ofertar las plazas de los trabajadores con contrato laboral, pues otro engaño más, han salido en la oferta pública de estabilización del personal, pero no olvidemos que en esta oferta no se estabilizan las personas sino los puestos, por lo que no sabemos cómo quedarán todos estos trabajadores después de la OPE.

En cuanto a los aspectos asistenciales si que se ha avanzado con la integración ya que se han hecho muchas más contrataciones, que hacían falta ya que estaban bajo mínimos cuando pertenecían al Cabildo, y se ha notado también en la celeridad de las contrataciones, antes con una tardanza de hasta cinco días.

¿Qué medidas exigiría el sindicato a la Consejería de Sanidad para dar solución a la carencia de especialistas que, endémicamente sufre la isla? 

Yo creo que la solución pasa por varios temas, primero, y que afecta al conjunto de las siete islas, es aumentar los números clausus de las distintas especialidades, segundo, y que va más encaminada al problema que afecta específicamente a la isla, y es que se oferten contratos de mayor duración que les permita una estabilidad laboral. Otro problema que existe en la isla, es la falta de viviendas. Los médicos, al igual que ocurre con los profesores, les resulta complicado conseguir una viviendas para poder afincarse, esto se ha agravado por el uso extendido de la vivienda vacacional, lo que además encarece profundamente el precio del alquiler de las pocas viviendas que puedan quedar.

Cómo se entiende que, con las carencias existentes en la isla, el SCS hable de un porcentaje del 80% en el nivel de satisfacción de los usuarios. 

La vedad es que no sé a qué ciudadanos han preguntado. Contrariamente, a nosotros lo que nos llega es la “indignación” de muchísimos pacientes que, primero, la cita para un médico de familia, la espera muchas veces supera los cinco días, con lo cual se ven abocados a asistir a urgencias, colapsándolas. Por otro lado, la situación se agrava cuando esperas por una consulta que, según la especialidad de que se trate, puede tardar de dos meses a dos años. Ya no hablemos después de esa primera consulta y tras hacer las pruebas pertinentes, el paciente tiene que ir a quirófanos: eso ya es de pena, y una vez realizadas las pruebas de anestesia puede transcurrir hasta los seis meses para, en algunas ocasiones, se tengan que repetir dichas pruebas porque ya han caducado.

Qué carencias concretas sufre en estos momentos la isla que hace que se rompa el principio de equidad para los habitantes de la isla. 

Intersindical Canaria demanda un servicio de hemodinámica en Lanzarote al igual que todos aquellos servicios que ayuden a diagnosticar y a tratar cuanto antes una patología. Nos negamos a aceptar como natural que los pacientes se tengan que desplazar las islas capitalinas a recibir tratamientos porque aquí no existen. El servicio de Hemodinámica, dentro de la especialidad de cardiología, es de importancia vital, ya que un minuto en dar respuesta puede resultar vital para salvar una vida, sobre todo teniendo en cuenta que el Hospital el de Lanzarote, además, no cuenta con helipuerto, lo que obliga a realizar el desplazamiento a través del aeropuerto de la isla, y de allí el traslado a para Gran Canaria, demora añadida esta que aumenta aún más el riego vital para el paciente.