En el asunto de la migración y el campo de deportación africano en el que España y Europa ha convertido a Canarias, los gobiernos de España y de las CC. AA del Estado, practican la misma estrategia colonial y racista. No de otra forma se puede calificar la política de puertas abiertas y libre residencia que ofertan a los refugiados ucranianos en los territorios de Estado, frente a la negativa a la acogida de los migrantes del tercer mundo retenidos en Canarias, entre ellos los 2.500 menores recluidos en las islas, y de los que el presidente español y sus homónimos territoriales, abominan y rechazan a acoger en su territorio continental europeo.

La Conferencia de presidentes celebrada recientemente en la isla benahoarita, ha supuesto la constatación de la hipocresía racista y colonial del PSOE y de todos los presidentes de las comunidades autónomas del Estado hacia Canarias, escogiendo precisamente éste territorio colonial de deportación para celebrar una cumbre de planificación de acogida residencial de los ucranianos por toda la geografía española sin hacer mención alguna a la emergencia migratoria que desde hace años viene sufriendo el archipiélago. En tal encuentro, otra vez, la impostura del presidente, Ángel Víctor Torres, ha resultado cobarde, patética y ultrajante para el conjunto de los canarios.

El racismo que exhibe VOX no es peor que este otro gubernamental que ejercen el PSOE y Unidas Podemos al segregar a los canarios  y a la migración que, indignamente, confinan y amontonan en nuestro archipiélago.