Tras cinco meses de catástrofe, la situación de los afectados es cada vez peor. El diccionario de la Real Academia Española de la Lengua define a la persona que obra o habla sin comedimiento o respeto y con descaro, y que se comporta de forma inmoral, como un sinvergüenza.

Los afectados hemos asistido en las últimas dos semanas cómo el aparato del poder, ha sacado toda la artillería mediática y de propaganda gubernamental publicando todos los días noticias, notas de prensa y declaraciones en todos los medios a su alcance, los cientos de millones que están llegando a los afectados, lo perfectas que son las desaladoras y de cómo han salvado las fincas de la costa, las decenas de reuniones muy productivas en las que se están atendiendo todas las necesidades de los afectados,  y en las que, sin ningún pudor, proclaman a los cuatro vientos que están contando con los afectados para la reconstrucción.

Pero paralelamente y ya en el mundo real, vemos cómo de forma tozuda todas las asociaciones de vecinos, plataformas, los agricultores, las ongs, los ecologistas denunciamos al unísono y con el mismo ímpetu la arbitrariedad, la falta de información, el ninguneo y la desfachatez que las administraciones que nos gobiernan, y que con una clara y meditada estrategia de desinformación y de arrinconamiento al afectado y sus representantes, ningunea los derechos democráticos de los afectados y mienten sin vergüenza alguna a los ciudadanos.

De nada ha servido las decenas de escritos presentados por la sociedad civil ante las autoridades, de nada ha servido la apertura de oficio de una investigación del Defensor del Pueblo o la denuncia del propio Consejo Económico Social de Canarias, al respecto de la nefasta gestión que las autoridades del Cabildo, el Gobierno de Canarias, así como la Delegación del Gobierno en Canarias, y por tanto el Gobierno Central, para que se den siquiera por aludidos del desastre económico y social que están gestando.

Ni un ápice de autocrítica de ninguna autoridad respecto a lo negligente de la gestión de la crisis. Ni una sola reunión en la que el afectado haya sido de verdad el centro de las decisiones, o que se le haya dado voz y voto en el proceso de decisión. Ni una sola respuesta de los poderes públicos a nuestras demandas. Ni una solución encima de la mesa que permita participar en la reconstrucción y poder sentarnos ya, los afectados, a planificar juntos el futuro de la isla. Todo para el afectado, pero sin el afectado. Poder absolutista en pleno siglo XXI en el reino de la Taifa de La Palma.

Mentiras, globos sonda, fuegos de artificio.

La Iniciativa Ciudadana de Apoyo de los Afectados por el Volcán denunciamos públicamente que, tras cinco meses de catástrofe, a los afectados no se nos considera por las administraciones como interlocutores válidos. Que las leyes, la democracia y la Constitución, no existen para ellos en La Palma. Que las administraciones nos torean en las reuniones de Revivir el Valle y lo peor, incumplen toda cortesía y empatía que debe una administración tener con el ciudadano que ha sufrido un volcán.

Ni un solo procedimiento administrativo están cumpliendo desde las administraciones locales, tampoco están cumpliendo con la Ley de Transparencia y de Buen Gobierno. Nos acusan de mentir, de engañar, levantan la sospecha sobre los vecinos y para colmo en la reunión de ayer Sergio Matos, coordinador de la Oficina de Atención a los Afectados del Volcán tuvo la poca vergüenza de convocar con 50 minutos de antelación a todas las asociaciones a una reunión cuyo único objetivo era una nota de prensa más de la propaganda del régimen “las opiniones de los vecinos, plataformas y personas afectadas son nuestra hoja de ruta en la reconstrucción. Para nosotros es clave que se sientan partícipes en el proceso”. Esto es de sinvergüenzas. Esa es la tarifa del respeto: 50 minutos de antelación. ¿Es así como nos hacen partícipes del proceso?.

Y ahora PSOE, PP y NC han politizado la participación y la reconstrucción de la vida del afectado. Nos han acallado bajo la lava azul y roja de la política local cortoplacista e inútil. Que está resultando irrelevante para el afectado. Ese es el nivel de la vergüenza del PSOE y del PP de la isla de La Palma. Ninguno. Cero absoluto.

El más que evidente fiasco en la gestión de los ayuntamientos y del Cabildo del PP y de las administraciones del PSOE en La Palma, los ha llevado a relegar al único que tuvo las agallas de tomar las decisiones correctas poniendo por delante de todas las consideraciones políticas y personales, a los afectados. Ahora, desde el Parlamento de Canarias, PSOE, PP y NC hacen pinza aplicando el rodillo y politizando una vez más la gestión para acallar las miserias y no investigar el por qué de los errores, del reparto arbitrario de las donaciones, el porqué, casualmente, no hay ni una sola casa para nosotros los afectados en El Paso. Ese es el castigo por tener principios y agallas en La Palma y hacer lo correcto: el ostracismo del alcalde incómodo.

Y para que todo quede en la familia, ponen al frente de dicha Comisión a la mujer del Presidente del Cabildo de la Isla de La Palma, a tapar las vergüenzas, que a su vez es concejala del Ayuntamiento de Los Llanos casualmente las dos instituciones que deben rendir cuentas a los afectados por su irresponsable gestión.  ¿Alguien en su sano juicio piensa que dicha Comisión será ecuánime a la hora de investigar los efectos de la crisis volcánica y de la reconstrucción en la isla de La Palma? Ese es el concepto de democracia transparente y participativa de los políticos de La Palma.

La cuestión que nos hacemos los afectados es ¿por qué jueces, partidos políticos, sindicatos, organismos de transparencia nos han abandonado a nuestra suerte? ¿acaso somos ciudadanos de segunda?, ¿acaso vivimos en una república bananera? Los afectados tomamos nota, y nos movilizamos y movilizaremos para denunciar que hayan acallado en el Parlamento al único representante que ha dado la cara por nosotros, y que por encima de cualquier posicionamiento político, nos ha mirado a los ojos a los afectados y ha defendido nuestras necesidades vitales en lo más duro de la catástrofe, y ahora en la reconstrucción. Ahora, le impiden ponernos voz los afectados en los órganos de participación democrática del Parlamento Canario. Una más que sumar al agravio que sufrimos.

Todas las administraciones del PP y del PSOE nos arrollan con cifras, con anuncios de proyectos y con obras de urgencia en las que se están dilapidando las ayudas que llegan para la reconstrucción. Y ante los hechos consumados, nos arrinconan contra las cuerdas a los afectados y no nos dejan ninguna otra opción que luchar por judicializar la gestión de la catástrofe y la de sus responsables.

Esta semana es un momento importante para todos los palmeros. Tendremos todos los focos mediáticos del país. Periodistas, políticos, presidentes y hasta el Rey de España van a visitar una isla en la que la democracia no existe para el ciudadano de la isla de La Palma. Es ahora el momento de actuar y de alzar la voz. Vamos a salir nuevamente a la calle a reclamar a pleno pulmón nuestros derechos. El próximo 24 de febrero ante la mascarada política, pitada ciudadana.

Iniciativa ciudadana