Con una pandemia en ciernes, en plena séptima ola, con la Atención Primaria colapsada y más de 500 camas ocupadas por pacientes Covid-19, el gobierno de Canarias, pretendidamente progresista pero que en nada se diferencia en la práctica de la derecha, y la consejería de sanidad, preparan no una nueva vuelta de tuerca, sino garrote vil para la sanidad pública, sus usuarios y sus trabajadores. La causa, el inicio inminente de un proceso de recortes laborales y asistenciales en el Servicio Canario de Salud (SCS), que afectarían principalmente a los capítulos I y II de los presupuestos. Esto es: recortes en personal y en equipamiento y obras desde ahora hasta final de año, con la preparación de un anteproyecto de Ley de Presupuestos de cara al 2023, similar para sanidad al del 2019.

Casi dos años de discurso realzando las bondades del NEXT GENERATIÓN (Fondos europeos) y ahora resulta, se confirma que aquellos ríos de dinero procedentes de Europa, que nos venían a salvar de la pandemia, no eran sino el ejercicio de la publicidad fraudulenta de un rescate en toda regla.

Intersindical Canaria traduce: no sólo dejan tirados a los trabajadores y a la ciudadanía en plena pandemia, ocultando datos, minimizando la importancia del elevado número de fallecidos y no tomando ningún tipo de medida…No sólo no mantienen el número de efectivos para poder hacer frente a la atención sanitaria, sino que ahora, la pretensión es dejar de renovar la contratación a las nuevas acciones que asumen el incremento de tareas, más de mil efectivos en el conjunto del SCS, solapando el discurso de la OPE de estabilización. Queda claro que en ningún momento, tomaron la decisión de gestionar para fortalecer el sistema sanitario público, más allá de “extraviar” cuatro millones de euros, que se sepa, destinados a la adquisición de material sanitario de protección.

Todo ha sido un parche. Paralelamente hay dinero público para múltiples macro proyectos como un circuito del motor…

Intersindical Canaria advierte: en caso de materializarse este despropósito de recortes para estrangular los servicios públicos, en un contexto de subida incontrolada y generalizada de los precios, de incremento del paro a pesar de la llegada masiva de turistas y con la precaria situación socioeconómica de Canarias, dejando en la exclusión social a miles de trabajadores, anunciamos que la conflictividad laboral no tendrá tregua.